La imagen de Baby presentado a la fiscalía me quemó el seso. A esas alturas habrían vaciado la información de su móvil y repasado mi epíteto entre su lista de contactos, “Profe”, como me...
n aquellos días me aferraba a conseguir empleo desde la cabina de un teléfono público. Invertía el pequeño ahorro en tarjetas Ladatel, en ejemplares de El Universal y en pergeñar en...
uando volví a la ciudad y me invitaron a impartir clases en la universidad donde estudié, parecía que mi vida por fin cobraría cordura e iniciaría un camino de orden y prosperidad. Era una...
alí del Barba Negra hecho una cuba y me boté a caminar de regreso a casa porque me quedé sin un clavo. El día se declaraba en el cielo. Iba con buen ritmo por la Progreso cuando de improviso...
ara los nacidos durante los años setenta, decir José José era enunciar el estado de las cosas. El tono sentimental de los tiempos. Barítono. Apretado. Desgarrador en su liberación. En 1980...
e vas a embarrar pensé cuando mi hermano me invitó. Hasta entonces esa ciudad frontera sólo significaba el lugar privilegiado del país donde tocaron Misfits y Ramones. Recordé que Luigi radicaba...
n 1978 Ricardo Garibay publicó “Acapulco”, una crónica en respuesta al desafío que le plantó el cacique Rubén Figueroa Figueroa, quien lo retó a escribir acerca del sur profundo. A pesar de...
uando me llevaron al Torito me dije no mames ni siquiera manejas coche en la Ciudad de México. A las ocho de la mañana salí del metro y pasé a la tiendita a comprar las últimas Modelo antes de...
uando me invitaron a Colombia me dije no mames, quédate lo más que puedas a la verga. El tiquete redondo era para veinte días aunque no sabía cómo iba a gastar casi un mes en Bogotá. No fui de...
Hay verdades en la vida que pegan y uno se esfuerza por esconderlas hasta de la conciencia, sobre todo porque avergüenzan. Me sucedió luego de leer el artículo “Los años setenta. Breve historia...