Los seleccionados “pumas” que no asistieron el martes a su entrenamiento llegaron ayer a su campamento con la novedad de que habían estado en la Procuraduría del Distrito Federal, porque fueron estafados con 32 mil pesos cada uno en la compra de unos coches.
Enrique Borja, José Luis González, Aarón Padilla, Luis Regueiro y Rulo Vázquez, fueron audazmente timados por un supuesto agente de autos, quien les ofrecía una verdadera ganga: Valiants, modelo Acapulco 1966 en la cantidad arriba anotada. Pues resulta que los muchachos se volvieron locos ante esa “auténtica” oferta, pagaron inocentemente y no recibieron coche alguno.
Para los “cracks” universitarios es un duro golpe, ya que el capital “invertido”, es y el fruto de mucho trabajo y bastantes golpes… Ojalá y la policía logre atrapar a ese vivales y los futbolistas recuperar su dinero.
El club, por su parte, dispensó la falta a los muchachos, en vista de lo sucedido.
Por otra parte diremos, que los pupilos de Mario Pérez, entrenaron normalmente ayer en el estadio Olímpico de la Ciudad de los Deportes, donde ejecutaron tiros a gol y ejercicios de calentamiento.
Publicada originalmente el 27 de octubre de 1966 en El Heraldo de México.