Un verdadero pleito de vecindad en el que intervinieron todos los vecinos, se suscitó cuando la señora Otilia Granados Dávalos, agredió con un garrote a la señora Celia Alonso Ramírez, de 24 años, con domicilio en Juan de la Granja 49, interior uno, en la colonia Balbuena.
La lesionada fue recogida por una ambulancia de la Cruz Verde, donde declaró que Otilia le reclamaba que se arreglaba demasiado para atraer a su marido, lo cual niega desde luego, pero que sí tiene amistad con él, por que lo conoce desde hace tiempo. Manifestó que el viernes 29 del pasado mes de abril, como a las 12 horas, se encontró en la vecindad con Otilia y que sin motivo aparente la agredió. Más tarde, cuando se encontraba en el lavadero, salió la suegra de Otilia, señora Lugarda Jiménez, tuvieron una riña, para salir en seguida Otilia y su marido, Alberto Ríos, un hermano de éste, llamado Fidel Ríos, y sus parientes Carmen y María, y que entre todos se le fueron encima, con cuchillos, de los conocidos como “chairas”, que usan los zapateros.
De las resultas de la agresión, Celia Alonso Dávalos sacó una herida en el antebrazo izquierdo y múltiples golpes en varias partes del cuerpo. Paula Contreras, de 30 años, tía de Celia, con domicilio en el departamento 5 de la misma vecindad, salió en ayuda de su parienta y resultó también lesionada. Las inculpadas fueron detenidas y consignadas a la Penitenciaria, o sean, Otilia Granados y Paula Contreras Santader, mientras que Celia Alonso Ramírez, Lugarda Jiménez y los otros, quedaron en libertad con las reservas de ley.
Nota publicada el 3 de mayo de 1955 en El Nacional.
