LOS SIGNOS Y SU INFANCIA
Aries: El niño Aries tiene un gran Edipo o una gran Electra. Sin embargo, termina aliándose e identificándose con el padre. Al querer conquistar la aprobación paterna, aquellos arianos que no tuvieron padre, o tuvieron un padre no amoroso, sean hombres o mujeres, harán de esa lucha una constante en su vida, sobre todo ante cualquier autoridad que se les aparezca, incluida la pareja; ni qué decir del jefe o cualquier otro que los confronte. Todas las acciones de su vida se encaminarán a que esa figura paterna los mire, los reconozca. Cuando el hijo aries es abandonado y más tarde vuelve a encontrarse con el padre, se enfrentará directamente con él porque de forma inconsciente aries quiere matarlo y psicológicamente debe hacerlo. Si no resuelve o mata al padre psicológicamente, el ariano siempre estará involucrado en relaciones extramaritales, tríos amorosos con personas casadas, buscando ese lugar que su niño interior no pudo quitarle al padre.
Tauro: Tauro también se identifica con el padre. El niño tauro necesita tener contacto físico con su entorno, por eso ama la posesión de las cosas. Desde pequeño le gustará tener, atesorar y solamente a aquellas personas que ama les permitirá tocar o disfrutar de las cosas que considera suyas y que por ende ama. El tauro que no llega a entablar una excelente identificación con el padre por el motivo que sea, tendrá problemas con las posesiones en el futuro: aunque logre acumular nunca será suficiente o tendrá tendencia a perder lo que acumulado.
La madre le representa al niño tauro seguridad por lo que si está se ausenta o muere, los tauro tenderán a ser avaros e inseguros aunque externamente parezca que no lo son. Ellos se compensarán exageradamente comprando como locos.
Para tauro la sensualidad será indispensable, llegando incluso a cosificar a las personas que ama o desea, no puede siquiera imaginar o aceptar que tienen sus propias vidas, sus propios sentimientos y que un día pueden abandonarlos. Siempre tendrán justificaciones que los eximen de su responsabilidad para con el otro porque no les queda claro que las personas no son suyas. Es muy importante hacer consciente al niño tauro de esto para que no sea un adulto tozudo, desconfiado y que busque placer a cualquier costo, sin control de sus deseos personales y sin posibilidad de contemplar las necesidades de los otros. Adictos al trabajo y acumuladores compulsivos. Tauro piensa que incluso sus hijos son una propiedad.
Géminis: Al niño géminis le cuesta mucho trabajo comprender el lenguaje de los adultos, no es raro que estos niños tengan problemas de dislexia o lenguaje cuando están mal aspectados, lo que no quiere decir que no sean inteligentes, solo que tienen limitaciones al querer comunicarse, tienen tanto que decir que pueden encontrarse con que no los entienden y encerrarse en su diálogo interno.
Si por alguna razón hay un padre o madre intransigente, o muchos hermanos, el géminis tenderá más a encerrarse, es muy importante poner atención al niño géminis porque si tiene competencia con los hermanos o no se siente atendido tenderá a deprimirse y a tener miedo de expresar sus sentimientos.
Cuando de pequeños no logran la atención de los padres o no pueden comunicarse con ellos adecuadamente, el géminis tiende a crear su propio mundo de fantasía y a lo largo de su vida va convencido de que las cosas son como él las imagina aunque todos los que lo rodean estén seguros de que no es así, por eso muchos llegan a considerar que géminis miente, pero esto es falso. Cuando un géminis hable con usted fíjese muy bien en lo que le está diciendo porque seguramente querrá decir más cosas, y luego le reclamará porque usted no le puso atención. El universo de géminis es mental, odia los sentimientos, le da pánico cualquier compromiso emocional, él es el eterno adolescente que no puede dar más.
Cáncer: La infancia es determinante para el niño cáncer. Si es feliz cuando niño no importará a lo largo de su vida las adversidades con las que se encuentre, será feliz siempre; a éste como a ningún otro signo lo marca su infancia, la relación con la madre es fundamental, siempre luchará contra el padre porque él quiere ser un hijo eterno.
Si cáncer tiene una buena relación con su madre, la mitad del camino de su vida estará allanado pero si no se identifica con ella ni encuentra en ella lo que desea, un sentimiento de insatisfacción y orfandad lo acompañará toda su vida, se sentirá un huérfano perpetuo y buscará compensación en la bebida, en la comida, en las drogas o en los bienes.
Cáncer desearía ser un feto eterno, gozar de la tibieza y seguridad que da el útero materno. El cáncer ve a la familia como un clan y busca siempre la pertenencia al mismo, incluso cuando busca pareja requiere la aprobación de su aprovación clan; si el clan no aprueba a su pareja es capaz de dejarla. Si un cáncer tiene una familia numerosa y padres ideales retrasará su salida de casa y buscará emular en todo a esa familia llena de tradición y costumbres; si no tiene una familia ideal a menudo buscará un clan al cual pertenecer o uno para fundar.
Si no tuvo madre o familia ideal buscará a toda costa una mujer que actúe como su madre o como su hija pero no como su igual, a él le cuesta trabajo establecer relaciones entre iguales pero le es más fácil acomodarse como hijo de su pareja.
Para cáncer enamorarse y tener una relación afectiva es cuestión de vida o muerte, para muchos de ellos ese puede ser el tema de su vida. Le causa angustia enfrentar la vida sin alguien a su lado.
Leo: El niño leo oscila entre la admiración profunda al padre y su deseo de superarlo. A leo también le cuesta abandonar el papel de hijo, quisiera ser el amado hijo eterno. El niño leo requiere la admiración y el aplauso de sus padres.
El problema de Leo es dejar de ser un príncipe para convertirse en rey, siempre batallará para conseguir el lugar de autoridad que tenía el padre y si por algún motivo el padre no estuvo o era débil, será más difícil para él porque le implica más trabajo. Leo quiere el lugar preponderante pero le da pereza luchar por el mismo.
Si el niño Leo no resuelve este problema tendrá grandes decepciones y no recibirá la calidez que espera sino una lógica y fría respuesta de la autoridad externa; para Leo eso será frustrante y puede arrastrarlo durante toda su vida: un jefe que no lo reconoce como él cree merecer, una mujer para quién él no es la razón de vida, etc.
El destino de Leo es llegar al centro sin su obsesiva necesidad de ser reconocido, su primera tarea es reconocerse él, saber quién es, qué quiere y a dónde, va pero con objetividad, con desapego y sin esa infantil necesidad de ser visto, no en vano muchos Leo siguen la carrera de actuación y aman los escenarios o la política. Lo suyo, lo suyo, es ser reconocidos.
Virgo: El niño virgo, más que ningún otro, proyecta su yo en la casa de sus padres. Él ve a su padre, aunque puede que el padre no sea así, como alguien a quién le gustan los detalles, que está pendiente de la limpieza de la casa, del orden y cuya religión es el trabajo y virgo siempre trata de adaptarse a las necesidades del hogar. Si por alguna causa falta el padre o la madre, inmediatamente el hijo virgo tomará el papel del ausente y se convertirá en la hija-esposa y madre de los hermanitos, la que les organiza la casa, los educa y les da de comer o el niño hará todo lo posible porque la armonía de la familia no se rompa. Casi siempre es el hermano trabajador al que los demás acuden o el tiranuelo de la casa.
Virgo tiene un dilema a lo largo de su vida: adaptarse a su entorno o seguir su vida por la libre pero eso le causa horror porque ello implica enfrentarse a lo que no controla, incluso en el amor actúa entre el dilema de quedarse en lo conocido o intentarlo nuevamente e irse por la libre; casi siempre gana lo primero. Aquellas mujeres que entablan una relación amorosa con un hombre casado de signo zodiacal virgo, difícilmente lo verán divorciarse.
Aparentemente virgo es muy fuerte y no necesita de nadie pero en realidad depende mucho del otro, ya sea la madre, el jefe, o el cónyuge.
El niño virgo que no recibe aprobación o que le toca ser el que se queda en lugar de alguno de los padres tenderá a encerrarse en su propio cuadrado, en su propia cárcel, aun en el amor le dará miedo a entregarse con alguien completamente diferente a él, le da miedo ilusionarse con alguien que de tan diferente, no puede controlar. Puede reducir su vida tanto por ese miedo que se enfermará constantemente.
Libra: No hay cosa peor para un niño libra que un hogar donde no reine la armonía, la belleza y haya sobresaltos. Libra huye de la riña y el disgusto, es uno de los niños a los que más altera un pleito entre los padres. Las cosas feas y vulgares lo violentarán, y un acto agresivo sobre él le dejará huellas indelebles, lo apagarán y pueden reducirlo hasta hacer de él un fracasado. Al niño libra no hay que sacarlo de sus ensoñaciones, hay que tenerle mucha paciencia y enseñarle a encontrar la belleza aun en las situaciones ordinarias de la vida. Son niños muy inteligentes que lo único que necesitan es tranquilidad y armonía. Si tienen estos elementos sufrirán menos al enfrentarse a la realidad que si no los tuvieron, pues buscarán que su pareja resuelva esas carencias y si no encuentran satisfacción a su ideal de armonía y belleza buscarán y buscarán en una y otra persona.
Un libra que no ha resuelto estos conflictos, puede convertirse en un ser frívolo, inmaduro, con mucho miedo a la responsabilidad y al envejecimiento.
Escorpión: El niño escorpión tiene un gran potencial libidinal y emocional, se mueve entre el tanatos y el eros, pero ambos extremos son delicados para su psique. Si su tendencia va hacia el eros será el niño que siempre quiere jugar al doctor con los otros niños, al que le gusta tocar sus genitales y los de sus compañeritos de juego; pero si esta parte se reprime o no se le da el afecto suficiente rechazando sus caricias o sus besos, se deprimirá. A escorpión todo lo conmueve y todo puede hacerlo llorar, los padres deben actuar con la delicadeza suficiente para no lastimarlos, ni exhibirlos, ni criticarlos, solamente acompañarlos en sus emociones, dejarlos fluir. Aun si el niño les dice que está triste, dejar que exprese sus sentimientos y enseñarle a decir que le pasa.
Es muy importante No culpar al niño escorpión nunca, la culpa nace con el escorpión, siempre se siente culpable de algo y si los padres los critican, los comparan o los culpan directamente de cualquier cosa, el daño estará hecho.
Escorpión siente culpa por la humanidad porque él si comió y otros niños no, es muy empático, entonces basta con lo que él siente, no es necesario cargarlo con más. El mundo de las emociones es el entono más delicado para los niños escorpión. Los padres deben ser muy conscientes de sus expresiones o sus actitudes con los niños: si están tristes, enojados o frustrados, ni siquiera es bueno comentarlo delante del niño escorpión porque él asumirá que es su culpa, lo que puede disparar su parte tanática hasta llegar a extremos. De la triada de agua: piscis, cáncer y escorpión, escorpión y piscis son los más extremosos.
Sagitario: El niño sagitario se identifica rotundamente con el padre porque el suyo es un caballero valiente que le hará vivir inmensas aventuras y con quién podrá salir a cabalgar sin límite. Si el padre no está o muere, sagitario exigirá en el futuro a los hijos que se conviertan en su padre. No importa su desempeño progenitor.
El niño sagitario debe saber que hay límites y que no siempre su enorme suerte lo va a sacar de algunas de sus descabelladas aventuras, los padres deberán enseñarle que no hay bueno ni malo, solamente existen las consecuencias y que él debe hacerles frente a las mismas.
Lo más que habrá que enseñarle al niño sagitario es que no siempre se tiene la razón y no siempre se gana. Si sagitario no aprende estas dos cosas se comportará como un niño irresponsable eternamente.
Sagitario tiene la misión de enseñar, pero antes debe tener humildad para aceptar que no sabe y aprender de los demás; si no lo logra se sentirá a menudo frustrado aunque nunca lo confiese y aunque parezca imposible se deprimirá.
Capricornio: El niño capricornio es un niño solitario; como la cabra, necesita subir al monte y estar en soledad para imaginar, para pensar. Los padres deben darle su espacio para crecer y por ningún motivo hacerlo víctima de ninguna injusticia porque si él se percibe como quien hace lo que los otros hermanos no quieren hacer, o al que siempre le tocan responsabilidades que no le corresponden, se convertirá en un ser mucho más rígido de lo que su naturaleza es y a lo largo de su vida siempre será victima de la injusticia y de cosas que no le tocan por bien que se porte o integro que sea.
Al niño capricornio no hay que pedirle demasiado, él siempre tratará de ganarse el afecto de los padres a través de hacer cosas, son muy cumplidos para ver si los quieren, por lo que es necesario que los padres les den su aprobación aún sin que hagan nada.
Solamente en la adolescencia se verán conatos de rebeldía en los capricornio que si no se expresan lo convertirán en un adulto rígido, moralista y criticón.
Acuario: Es uno de los niños más rebeldes del zodiaco, desde pequeño marcará sus territorios y querrá desobedecer a los padres.
Será un niño encantador por su inteligencia y su creatividad, porque todo le interesa y todo le da curiosidad, pero recordemos que también es un niño muy egocéntrico y tratará de llamar la atención a toda cosa. Cuidado con las travesuras de los niños acuario porque puede meter a sus padres en aprietos. Sus travesuras van desde lanzar al hámster por el retrete hasta volar el edificio.
Para acuario la atención del padre es la más valiosa, es el aplauso que busca. Lo percibe como una persona libre, relajada y desapegada, admira la libertad mental del padre y su modo de ver la vida.
La adolescencia del acuario será una eterna discusión con sus padres, hasta el fin de la misma. No se extrañen de que lleve a dormir a casa a un extraterrestre. Los padres deberán hacer acopio de paciencia y tolerancia.
Los padres deberán estar atentos a que acuario siempre tenga una búsqueda personal, acuario quiere ser alguien diferente y mejor que todos, alguien encaminado al bien común a los ideales. De no conseguirlo, se frustra, se amarga y se convierte en un tirano.
Algunos dicen que los acuario son ángeles caídos, que tienen la capacidad de aprender lo que diez personas pueden aprender juntas pero eso los lleva a la soberbia y a la desubicación. Los padres de un acuario no tienen una tarea fácil.
Piscis: El niño piscis es hipersensible. Sus padres no deben regañarlo si les dice que tiene miedo; muy a menudo el niño de piscis tiene miedo de la vida misma, la realidad le parece demasiado rasposa y agresiva, y generalmente los padres no saben cómo responder ante los miedos de piscis.
Piscis percibe cosas que los adultos no ven, y no es parte de su imaginación. No olvidemos que piscis es el gran espiritista del zodiaco, nadie como él transita entre el mundo espiritual y material. No es bueno reprimir esa parte en los niños piscis, si le dice que estuvo jugando con algún ser de otro mundo, si no sabe qué decir, no diga nada, pero jamás lo descalifique ni lo reprima.
El niño piscis vive en un mundo de emociones muy profundas y si se le reprime tiende a la neurosis extrema, a la depresión, al alcoholismo, o adicción al trabajo. Constantemente tiene ideas de suicidio.
Tiene devoción por su padre, se identificará con él y las palabras del padre son determinantes para él. Piscis es misericordioso y tiene una gran capacidad empática por lo que le causa mucho conflicto la vida de los otros, y en ocasiones le genera caos en su cabeza.
Piscis puede cambiar su vida por un solo acto de compasión, es su punto débil y por eso es fácil engañarlos, tienen una gran piedad por los otros y eso puede hacer que confundan la compasión con el amor.
Pueden quedarse anclados en una relación que no les satisface solamente por piedad hacia el otro, aunque desfoguen su insatisfacción en la neurosis o incluso, violentamente. Hay que tener muy vigilada la estabilidad y la limpieza del ambiente que rodea al piscis.